El Club León regresó a la Copa MX después de una triunfante ausencia de dos años. Y se estrenó a lo grande. Ante una entrada de 5700 espectadores en el estadio Alfonso Lastras y acompañado por una hinchada que componía cerca del 10% del público, el equipo verde se impuso por dos goles a uno al Atlético San Luis.
Probablemente, Peña podría ser válido como delantero.
El Partido
Al encuentro concurrió un San Luis con todas las ganas del mundo y un Club León que se tomó el partido muy en serio pero que concurrió tarde. Esto se explica porque Pizzi decidió darle continuidad a la idea futbolística tratando de que Velarde, Burdisso y Novaretti aprovecharan para acelerar la asimilación de la idea, Peña y Montes fortalecieran automatismos y Yarbrough comenzara a ganar rodaje.
Atlético San Luis, decíamos, salió con jugadores deseosos de reivindicarse. El estandarte fue Arce, ex Fiera, que marcó de penalti, pivoteo el ataque, condujo y presionó. A pesar de ello, estuvo sumamente impreciso, al igual que César Villaluz. Ambos fueron puntas que remataban un 4-4-2 con el que Arias pretendió cerrar los pasillos interiores y salir con juego directo.
El descanso quedó con un 1-0 corto. Los potosinos aprovecharon nuevamente una deficiente transición defensiva de La Fiera para atacar con las conducciones de Villaluz y la dificultad de López, novedad leonesa, para cerrar el centro del campo.
Para la segunda mitad León fue cambiando sus extremos de su 4-3-3 dando entrada a Burbano, por ejemplo, y logró estirar a la defensa potosina. Así encontró pasillos por dentro que le permitieron llegar, rematar y finalmente, ganar, ya con Peña, Montes, Burbano, Elías y Boselli en el campo.
Con Pizzi, libertad significa responsabilidad.
En la segunda mitad pudimos observar con más frecuencia, pues en la primera parte también sucedió, que Montes decidía las zonas por las que haría presencia. Fue notoria en el primer tiempo una jugada donde dio sin balón una vuelta a todo el campo rival y en el segundo como cayó a la banda izquierda para dar amplitud al equipo y generar desequilibrio. Frente a un rival que esperó mucho más atrás, Montes adquirió peso e importancia y fue encargado de crear.
Con Pizzi, los compadres tendrán mucha libertad ofensiva, pero con la responsabilidad a cuestas de ser los que guíen al equipo a la victoria, aun cuando no culminen las jugadas personalmente.
Peña
Pasemos a hablar de Carlos Peña, quién probablemente se convertirá en la pieza clave de este Club León. Su posición de arranque es la de interior, variando según las circunstancias del juego, puede ser ubicado del lado derecho o izquierdo del mediocentro.
A diferencia de otros años, ahora su intercambio de posición con Montes es más frecuente. De todos modos, si el Chapo libera el interior izquierdo, será más probable verle por ahí.
Lo que definitivamente cambió es su rol: ahora abarca todo el carril central. Y con él ha venido une evidente mejoría de su juego.
Contra Santos Laguna vimos una sorprendente actitud en el apoyo para la salida de la pelota. Desde zona baja, apreciamos un buen criterio para dar el primer pase o conducir para hacer perder la posición a los rivales y entonces soltar la pelota.
Como interior, sabemos de su aportación doble, combinar con Montes, ayudar en la circulación y participar activamente en la recuperación. Pero Pizzi lo tiene como pieza clave en fase ofensiva. Peña ya no se limita a su conducción directa y después disparar o pasar a un compañero, ahora asume directamente el rol de mediapunta.
Una vez con la pelota recuperada y gracias a su capacidad física (velocidad, potencia, resistencia, fuerza) el Gullit pasa al ataque. Ocupa el carril central y, en general, podemos hablar de dos comportamientos:
- Con balón: Peña conduce habitualmente hacía el área, pero con dos matices, el primero, su posición más centrada. Y el segundo, su prioridad ahora es buscar el pase al espacio. Es decir, el pase filtrado a la espalda del delantero para que remate el delantero. Es una cualidad inherente de enganches, una virtud que se lleva en el alma. No es de extrañar que se le dificulte y que de diez intentos probablemente falle nueve, pero irá mejorando y además, de esta manera el León rompió el juego contra el campeón de la Liga MX.
- Sin Balón: Carrera directa para ser segundo delantero. Se coloca en la línea defensiva, aguardando el centro para rematar. De esta manera, el Club León pasa mágicamente a tener dos delanteros y además, dos hombres que la defensa debe marcar. Eso es oro para Boselli y permite tener al León cinco mediocampistas y en ataque, dos delanteros. El ejemplo de esto es el segundo gol, del propio Peña previa participación de Boselli.
