Ascensos y descensos en México
Por Arturo Guerra Muñoz
Como sabemos, el futbol mexicano es “sui generis”, por decirlo de alguna manera. Actualmente, no funciona el sistema de descenso – ascenso entre la primera y segunda categoría de nuestro futbol. La última vez que un cuadro descendió, ocurrió en la temporada 2016-17 (Chiapas). Esto, sin referirnos a desafiliaciones. La última ocasión que un equipo ascendió a la máxima categoría, por la vía deportiva, pasó en la campaña en la 2018-19 con el Atlético de San Luis.
Los que solemos ver con frecuencia otras latitudes o los que tienen un poquito más de edad, sabemos que en el futbol el descenso es parte de la vida. De nuestra liga, los únicos que nunca jugaron en 2da son América y Chivas. Pumas, Toluca y Cruz Azul -a pesar de nunca haber descendido-, pasaron por una división inferior.
De los otros inicialistas de nuestra liga que se mantienen vigentes (Atlas y Atlante), los Rojinegros descendieron 3 veces, sin embargo, en cada ocasión volvieron al año siguiente y desde 1979 se mantienen en 1ra. Los Potros de Hierro descendieron en 4 ocasiones: en las 2 primeras regresaron al año posterior, en la tercera, el descenso no se materializó y después de la más reciente no ha podido volver; cumplirá su noveno año en el segundo nivel.
Otros equipos históricos como León o Tigres también han probado la amargura de bajar de categoría. Los Panzas Verdes son el cuadro con más ligas en nuestro país que ostentan la mayor cantidad de años en el nivel inferior mientras que el conjunto nicolaíta tuvo la fortuna de volver al año siguiente de su descenso en los noventa. Su vecino de patio, el Monterrey, también descendió en 1957 para luego regresar en 1960 y mantenerse desde entonces en 1ra.
Otro equipo añejo como el Pachuca descendió hasta en 3 oportunidades, incluso bajando al 3er escalón en la temporada 86-87. El equipo tuzo es la única institución de las actuales en Primera que previamente tuvo un paso en dicho peldaño. Un viejo conocido de la afición leonesa, el Irapuato, también estuvo en el tercer escalafón en la década de los ochenta, sucedió en la campaña 82-83 antes de que visitara ese sótano varias veces en este nuevo siglo.
También otro de los elencos con mayor historia en nuestra nación como lo es el Morelia, sufrió la pena de estar varios años en la segunda división; fueron 13 años entre 1968 y 1981, así que el equipo michoacano ya tenía 39 años en el máximo nivel antes de su mudanza a Mazatlán.
En nuestro país, Zacatepec y Veracruz son los equipos con el mayor número de descensos, con 5.
Alguna vez, un amigo, por allá de 1998, me decía: “infierno es encontrarte en 3ra o 4ta, en 2da estás a un paso de la Primera División”. León ya había estado 3 años en 2da en los años ochenta y después se aventó otros 10 en esa categoría, pero nunca descendió de la misma. Pues bien, en otros futboles más desarrollados tenemos a equipos históricos que están o estuvieron recién en el tercer nivel. Para esta temporada 2022-23, escuadras como Sunderland (6 veces campeón de la primera división inglesa) o Kaiserslautern (2 veces ganador de la Bundesliga) regresaron a 2da después de varios años en 3ra. No corrió con la misma suerte el Deportivo La Coruña (campeón de España en el 2000) que por tercer año consecutivo seguirá en la 3ra categoría.
La liga alemana vio regresar para la siguiente temporada al Werder Bremen (4 veces campeón de Bundesliga) y al Schalke (7 ocasiones campeón alemán).
Sin embargo, el Hamburgo (cuatro títulos de Bundesliga y uno de Champions) se mantiene desde 2018 en la 2. Bundesliga, incluso a pesar ser hasta entonces el único cuadro germano que jamás había descendido. También en 2da se mantiene el Nuremberg (9 veces campeón del país teutón).
Por otro lado, en Inglaterra volvió a la Premier el Nottingham Forest (campeón de Europa en 2 oportunidades) mientras que en Francia el Saint Éttiene (máximo ganador con 10 ligas), luego de perder una promoción, se fue a Segunda después de 18 años en élite. El equipo verdiblanco acumula hasta 9 temporadas en la categoría inferior con sus descensos en varias oportunidades. En Italia, el Genoa registró este año su noveno descenso empatando su palmarés de 9 scudettos. Las vueltas de la vida, unos históricos se van y otros regresan a la élite en sus ligas.
Debido a las bancarrotas de los clubes, en Europa ha sucedido que degraden a equipos hasta el último de los niveles del futbol profesional (4ta). Ocurrió con la Fiorentina en la primera década de este siglo mientras que al Napoli lo mandaron hasta 3ra en esa misma época; ambos conjuntos volvieron con el tiempo a la categoría máxima. En la década pasada, en Escocia, el Rangers fue bajado hasta la cuarta división, pero también con el tiempo regresó al máximo nivel.
Ahora, el Girondis de Burdeos (6 veces campeón de la Ligue 1), ha descendido a 2da en la pasada temporada 21-22, pero por no poder demostrar solvencia es que las autoridades deportivas de aquel país no lo han admitido en los 2 primeros escalones del futbol profesional francés.
Y no escribo ahora sobre el caso de los clubes refundados, que será un tema que tocaré en otra ocasión, pero que también es “habitual “se dé en Europa como castigo a los clubes impagos.
En nuestro continente, en Argentina 4 de los 5 grandes descendieron, 2 de éstos en este milenio con los casos de River e Independiente.
En Brasil, dentro de la Serie B en esta campaña 2022, están Gremio, Cruzeiro, Vasco da Gama y Bahía, todos campeones de Brasil en su momento y hasta monarcas de Libertadores en el caso de los 3 primeros mencionados. El año pasado, Botafogo salió de ahí y volvió a la Serie A.
En Ecuador, El Nacional de Quito (tercer máximo ganador de su país con 13 ligas) está en Serie B desde el año pasado.
Lo anterior, es solamente para ejemplificar los que sucede en otros países fuera de sus primeras divisiones y cómo las segundas y terceras también pueden ser encantadoras cuando existe un sistema libre de ascensos y descensos.
Hay que recordar que la base de cada futbol está en sus categorías inferiores (básicamente por el número de equipos), con éstas se sostiene la pirámide; la primera división solamente es la punta de dicha pirámide. En México no se tiene esta perspectiva. Si bien, nuestro futbol tal vez nunca ha sido capaz de sostener un sistema de 2 o 3 ascensos y descensos por año (ahora menos que nunca), sí debe tener ese incentivo deportivo ya que ahí también se encuentra la esencia de la competitividad. El futbol vino de Europa, no de Estados Unidos. La tradición del sistema futbolístico europeo se ha mantenido por más de 130 años. Europa es quien dicta el modelo y en Latinoamérica lo hemos solido tergiversar.
Y sí, sé que dirán que México no está, mediante sus inversionistas, para sostener o para solventar a equipos de divisiones inferiores y aspirar a ocupar los lugares de los que están ahorita en Primera, pero acaso nos hemos preguntado alguna vez si precisamente el “circo” de traslados de franquicias (entre otras muchas “circunstancias” que se suelen dar en nuestro futbol), lo que provoca que empresas y empresarios serios no quieran meter su dinero en este deporte. Entonces, esto se convierte en un círculo vicioso en donde ya no sabemos cuál es la causa original de las fatídicas consecuencias.
Los aficionados y habitantes de las ciudades que no tienen 1ra división, pero sí tienen una 2da o una 3ra o una 4ta sueñan con que el equipo de su población llegue algún día al máximo nivel y enfrente a Chivas y América. No todo es irle a los “4 grandes”. A mucha gente si le dan a elegir, ha de preferir que el equipo de su lugar de origen esté en la liga top y compita contra ese tipo de clubes a pesar de que ya sea aficionado de alguno de ellos.
Y va a sonar mal lo que digo, pero de vez en cuando está bien que descienda un club de los tradicionales, que le dé cierto lustre a la división menor, que la gente voltee a verla, que se haga de interés, que haya clásicos en ella. Las Segundas de Alemania, Brasil o Inglaterra son de los más atractivas y competitivas. Incluso, acá en México en años no tan lejanos hemos tenido en la “ex liga de ascenso” el Clásico del Bajío y el Clásico Tamaulipeco, sucesos que mantienen la expectación de la gente de futbol.
En fin, esto es sólo mi opinión muy particular. Usted también tiene la suya, estimado lector.