Reflexiones sobre la Leagues Cup
Por Arturo Guerra
Desde hace mucho se habló de que se fusionaran nuestras ligas; la FIFA no lo permitió. Además, en la práctica existía el inconveniente de la logística, las grandes distancias entre ciudades, sin considerar además las diferentes monedas y algunos otros temas contractuales como tope salarial, sindicato de jugadores, etc.
Por fin, después de 2 ediciones (2019 y 2021), además de una versión “showcase” o de exhibición (en 2022), se encontró el aval de Concacaf para hacer oficial a La Leagues Cup. El acomodo es que sirviera de clasificatorio al máximo campeonato de la confederación.
La Leagues Cup es un torneo para hacer dinero, sí; pero, como he dicho, también es un torneo oficial y además es clasificatorio a la Copa de Campeones de Concacaf, que eventualmente te da un pase al Mundial de Clubes.
Para clubes como el León, la Leagues Cup es la segunda oportunidad para calificar al torneo de nuestra confederación, dado que no lo pudo hacer a través de la liga.
A partir de este semestre, en la zona va a haber 3 copas regionales clasificatorias para la Campeones de Concacaf: la Centroamericana (5 cupos), la Caribeña (2 cupos) y la Leagues Cup (3 cupos), que es para la región de Norteamérica.
A través de sus campeonatos nacionales, USA y México pueden meter 6 clubes cada uno, pero Estados Unidos tiene un cupo incluido a través de su torneo de Copa (la U.S. Open Cup). Es decir, que la MLS, como tal, da 5 accesos y la U.S Open da un boleto al que la gane. Por cierto, el Inter Miami está en semifinales de ese torneo este año. Esto no puede ocurrir en México, puesto que ya no existe la Copa MX; por tanto, la Leagues Cup se ha convertido en nuestro “torneo copero”.
Se ha priorizado hacer negocio con los norteamericanos. Somos “co-sede” para el Mundial, al igual que Canadá, cuando sabemos que los estadunidenses por sí solos pueden llevarlo a cabo. Los balones de oro de nuestra liga -así como el Campeón de Campeones-, se realizan cada año en Los Ángeles. La Campeones Cup -enfrentamiento entre el ganador del Campeón de Campeones mexicano y el ganador de la MLS-, se efectúa en Estados Unidos.
Después de 2 ediciones, la MLS nos ninguneó y ya no hay juego de estrellas con la liga mexicana; en la edición de este año volvieron a enfrentar a un equipo europeo, como se hacía anteriormente. Pero para los directivos mexicanos, el “futuro” de nuestro futbol está allá.
Estamos dando muchas ventajas porque, como digo, para la edición 2024 (y en adelante) de la Concacaf, los Estados Unidos y la Liga MX tienen 6 cupos cada uno. Pachuca, Tigres, Toluca, Chivas, Monterrey y América, son nuestros representantes confirmados hasta ahora. Los estadounidenses, incluso, para el próximo año ya tienen un séptimo asegurado con el Whitecaps, que ganó el campeonato canadiense; sin embargo, el de Vancouver es un club que además juega en la máxima competición de USA, entonces es un equipo de aquella liga también.
Si bien es cierto que Canadá por sí misma, como país, tiene 3 cupos, este tipo de situaciones ocasionan que la liga estadounidense pueda tener un boleto adicional porque en el campeonato canadiense participan equipos de la Major League Soccer, pero que tienen su sede en ciudades del país de la hoja de maple. Los otros 2 cupos canadienses son por parte de su liga premier (para el mejor de la temporada regular y para el campeón). Ahí sí no participan equipos que también estén en la MLS.
Con la localía de la Leagues Cup, ¿quién dice que los 3 primeros de este torneo no sean gringos? Podrían tener hasta 10 equipos de su liga el próximo año en el torneo de la Concacaf.
Hay presencia mexicana en la tribuna, pero los campos de entrenamiento son de ellos, ellos no se tienen que mover de ciudad, nuestros equipos son los que sufren con los traslados.
Vamos a ver cómo trasciende el resto de este torneo binacional.